Esta fragancia para hombre es tan intensa, que el oro se funde creando rayas doradas por su esbelto torso, desprendiendo la máxima expresión del sex appeal. Cuidado no toques su piel, ¡te quemarás!
enciende todos los sentidos creando máxima adicción. El soleado haba tonka tropical se mezcla con la ya legendaria lavanda, y junto con el magnetismo animal del benjuí, crean una explosión de menta fresca y bergamota. Imposible no derretirse de deseo.